Cómo hacer leche de avena correctamente

La leche de avena es una bebida vegetal cremosa y sin lácteos que se ha vuelto popular en los últimos años, ya que su consumo nos reporta grandes beneficios nutricionales. La leche o licuado de avena se puede hacer en casa con avena, agua y un procesador de alimentos. Sin embargo, si no se prepara correctamente, puede volverse un poco viscosa o pegajosa. En este artículo, se comparten consejos y trucos para preparar el licuado de avena sin que se vuelva viscoso, incluyendo el uso de agua fría, reducir el tiempo de mezclado y usar una bolsa de leche de frutos secos de alta calidad para colar.

Para hacer el licuado de avena sin que tenga textura babosa, sigue los siguientes pasos:

Pasos para obtener un buen licuado de avena

  • Remoja los copos de avena: Añade 1 taza de copos de avena en 3 tazas de agua fría y déjala remojar durante 30 minutos.
  • Escurre y lava la avena: Escurre la avena y enjuágala bien bajo el grifo para eliminar el exceso de almidón, que es lo que hace que la leche de avena quede babosa.
  • Añade agua y endulza: Añade 2 tazas de agua muy fría y edulcorante al gusto (sirope de agave, stevia, etc.) o canela. Puedes poner una pizca de sal para potenciar el sabor.
  • Tritura: Tritura la mezcla en una batidora potente durante aproximadamente 20 segundos, no más tiempo. Las cuchillas pueden calentar la mezcla y obtendríamos la no deseada textura viscosa.
  • Cuela: Cuela la mezcla a través de un colador fino para separar los copos de avena del líquido. No hay que apretar mucho.
  • Sirve: Sirve la leche de avena en un vaso y guárdala en la nevera durante 5 o 6 días en un tarro cerrado.

Si quieres hacer leche de avena más cremosa, puedes añadir más copos de avena o menos agua y si quieres darle un sabor más intenso, puedes añadir extracto de vainilla o canela.

¡Que disfrutes de tu leche de avena!